Photo real art

Jerry Yu reúne las características de lo que los chinos llaman un rico de segunda generación. Estudió en una escuela preparatoria de Connecticut. Vive en un condominio de Manhattan que le vendió Jeffrey R. Immelt, exdirector ejecutivo de General Electric, en 8 millones de dólares. Y es el dueño mayoritario de una mina de bitcóin en Texas, que fue adquirida por más de 6 millones de dólares el año pasado.Yu, un estudiante de 23 años de la Universidad de Nueva York, también se ha convertido —sin querer— en un caso de estudio sobre cómo los ciudadanos chinos pueden mover dinero de China a Estados Unidos sin llamar la atención de las autoridades de ninguno de los dos países.El sitio de Texas, un gran centro de cómputo, no se compró con dólares sino con criptomonedas, las cuales ofrecen anonimat...

For generations, Western space missions have largely occurred out in the open. We knew where they were going, why they were going there and what they planned to do. But the world is on the verge of a new era in which private interests override such openness, with big money potentially on the line.Sometime in the coming year, a spacecraft from AstroForge, an American asteroid-mining firm, may be launched on a mission to a rocky object near Earth’s orbit. If successful, it will be the first wholly commercial deep-space mission beyond the moon. AstroForge, however, is keeping its target asteroid secret.The secret space-rock mission is the latest in an emerging trend that astronomers and other experts do not welcome: commercial space missions conducted covertly. Such missions highlight gaps in...